En México, 3.7 millones de menores trabajan: INEGI
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en colaboración con la Organización Internacional del Trabajo y la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), realizó la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) 2022. Este ejercicio es el segundo como encuesta independiente, pues de 2007 a 2017 el tratamiento fue mediante el Módulo de Trabajo Infantil (MTI). A partir de 2019, se realiza cada tres años como encuesta.
Se considera trabajo infantil cuando niñas, niños y adolescentes de 5 a 17 años participan en una o más formas de trabajo no permitidas. Se clasifica como ocupación no permitida a la que realizan personas de este grupo de edad en la producción de bienes y servicios destinados al mercado, o en ocupaciones de sectores económicos, lugares o actividades peligrosas. Asimismo, incluye a quienes realizan quehaceres domésticos no remunerados en sus propios hogares en condiciones no adecuadas, lo que incluye a niñas, niños y adolescentes que las realizan durante horarios prolongados o en condiciones peligrosas o riesgosas. En la figura 1 se detallan los componentes del trabajo infantil.
En 2022, 3.7 millones de niñas, niños y adolescentes realizaron alguna actividad considerada como trabajo infantil, y representaron 13.1 % de la población de 5 a 17 años (28.4 millones). La gráfica 1 ilustra el trabajo infantil y sus componentes, identificando 1.8 millones (6.4 %) que solo realizaban ocupaciones no permitidas; 1.6 millones (5.6 %) que exclusivamente hacían quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas y 318 mil que combinaban ocupaciones no permitidas y los quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas (1.1 %).
La ocupación no permitida la realizaron 2.1 millones de personas (7.5 %) entre los 5 y los 17 años. Asimismo, 1.9 millones de niñas y niños hicieron quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas, es decir, 6.7 % de la población de 5 a 17 años.
En 2015, la tasa de trabajo infantil se ubicó en 12.3 %, y en 2017 disminuyó a 11 % y en los siguientes años aumentó a 13.1 % en 2022. En este año, la tasa de trabajo infantil en niños fue de 15.5 %, mientras que 10.7 % en el caso de las niñas (ver gráfica 2).
De la población de niñas, niños y adolescentes de 5 a 17 años que realizaron alguna ocupación no permitida,1.5 millones (71.9 %) eran niños y 0.6 millones (28.1 %) eran niñas. Quienes estuvieron en ocupación no permitida de forma exclusiva fueron 1.8 millones (85.1 %) y quienes además las combinaron con quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas fueron 0.3 millones (14.9 %), de manera particular, de las niñas en ocupación no permitida 17.6 % también realizaron quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas.
En los últimos quince años ha disminuido el número de personas que trabajan en ocupaciones no permitidas, pues pasó de 3.5 millones a 2.1 millones, entre 2007 y 2022, es decir, la reducción fue de 1.4 millones de personas. Sin embargo, desde 2017, la población de niñas, niños y adolescentes en ocupaciones no permitidas ha mostrado niveles similares.
De los 2.1 millones de niñas, niños y adolescentes que realizan alguna ocupación no permitida, 2.0 millones (92.5 %) lo hacen en actividades consideradas de carácter peligroso. De este grupo, 1.5 millones (73.7 %) fueron niños y 0.5 millones (26.3 %), niñas.
De los 2 millones de personas en ocupación peligrosa, 1.1 millones (54 %) se encontraban en sectores económicos de actividad peligrosa, como agricultura, construcción, minería, industria química, entre otros. Por su parte, 1.1 millones (57.5 %) niñas, niños y adolescentes realizaron actividades que afectaron su salud y desarrollo como cargar cosas pesadas, o que les provocaron problemas físicos. Otros 437 mil (22.2 %) tuvieron horarios de trabajo prolongados y 846 mil (42.9 %) desarrollaron actividades con exposición a riesgos. Finalmente, 210 mil (10.6 %) laboraron jornadas no apropiadas como aquellas con horarios mixtos, nocturnos o rolaron turnos.
Los quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas son actividades dirigidas a la producción de bienes y servicios para el consumo de los miembros del hogar. Estas actividades no tienen una remuneración y afectan la salud o integridad física de quienes las realizan. En 2022, un total de 1.9 millones de niñas y niños y de 5 a 17 años realizaron estas actividades en condiciones no adecuadas. De esta cantidad, un millón (51.8 %) eran niñas y 0.9 millones (48.2 %), niños.
En particular, quienes realizaron quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas de forma exclusiva sumaron 1.6 millones (83.4 %) y quienes combinaron los quehaceres domésticos en condiciones no adecuadas con la ocupación no permitida fueron 0.3 millones (16.6 %).
Esta encuesta se aplicó en el cuarto trimestre de 2022, sobre una muestra de viviendas del Marco de Muestreo de Viviendas del INEGI con población entre los 5 y los 17 años de edad. Su objetivo es mostrar el panorama del trabajo infantil. Asimismo, busca mantener la continuidad en la generación de información sobre el tema para que las y los diseñadores de políticas públicas dispongan de información para la toma de decisiones orientadas a erradicarlo.
Esta edición incluye nuevos temas; en particular, los que se relacionan con las características y servicios de las viviendas en las que habita la población de 5 a 17 años. Con lo anterior, también se indaga en torno a la disponibilidad de bienes y servicios de telecomunicaciones, problemas que enfrentaron los hogares en los últimos años, entre otros.
La ENTI 2022 recaba datos sobre las personas de 5 a 17 años que trabajan y, sobre todo, que están inmersas en el trabajo peligroso (ocupación peligrosa), definido a partir de la legislación nacional8. En otras palabras, se trata de niñas, niños y adolescentes ocupados en sectores de actividad y ocupaciones peligrosas, actividades en exposición a riesgos, lugares de trabajo no apropiados, actividades que afectan su salud, jornadas no apropiadas y horarios prolongados. La ENTI también recaba información sobre los ocupados por debajo de la edad mínima que, de acuerdo con la legislación nacional, es inferior a los 15 años. En la medición del trabajo infantil se incluyen los servicios domésticos no remunerados de carácter peligroso. En la figura 1 se detallan los componentes del trabajo infantil.