Internacional

Boric condena persecución de opositores en Nicaragua

Nueva York, NY.- El presidente chileno, Gabriel Boric, condenó ante la ONU la persecución de opositores por parte del «régimen dictatorial» del mandatario Daniel Ortega en Nicaragua, con quien el líder sudamericano ya ha tenido algunos desencuentros diplomáticos.

En su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas en Nueva York, el presidente de izquierda dijo que el Gobierno de Ortega y su esposa Rosario Murillo también impide a sus opositores participar en elecciones, les despoja de su nacionalidad, allana sus viviendas y «les priva de derechos políticos».

«Me siento en el deber, como hemos señalado en otros foros internacionales, de denunciar ante esta Asamblea y el mundo, la persecución que hoy día vive todo quien piensa distinto del gobierno del régimen dictatorial del señor Ortega y (Rosario) Murillo en Nicaragua», dijo Boric.

La semana pasada, Boric dijo que había instruido a la Cancillería a entregar una nota de protesta al representante de Managua en Santiago como reacción a declaraciones que formuló Ortega sobre la policía chilena de Carabineros en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado. El presidente Boric llamó entonces «dictador» a Ortega.

En su discurso ante la Asamblea General de la ONU, Boric cuestionó las sanciones que Estados Unidos han impuesto de manera unilateral en contra Venezuela y Cuba.

Esas resoluciones «no aportan a mejorar las condiciones de vida del pueblo venezolano. (…) Para garantizar que hayan elecciones libres, con garantías, a todos los sectores, es también imperativo que Estados Unidos levante las sanciones».

Sobre Cuba, criticó las medidas impuestas por Washington y que se señale a la isla como país que promueve el terrorismo.

«No solo es falso, sino que nos violenta. Y por lo tanto instamos a Estados Unidos a seguir la línea que en su momento tuvo el gobierno de Barack Obama, cuando los sacó (a los cubanos) de esa infame lista (…) que tanto daño le hace, no al gobierno, al pueblo cubano, que no lo merece».

El presidente chileno recordó que la semana pasada, Chile conmemoró los 50 años del golpe de Estado que derrocó al socialista Salvador Allende, y destacó que los problemas de la democracia se solucionan con más democracia y que un golpe de Estado nunca es inevitable.

«Los derechos humanos son una base ética irrenunciable en la acción política, los derechos humanos no tienen un color político», dijo Boric y afirmó que la condena de esos derechos «debe ser clara sin importar cuál sea el color del gobierno que los vulnere».