Huye presidente sirio Bashar al Asad ante ofensiva de alianza rebelde
Las fuerzas de la alianza rebelde siria liderada por islamistas anunció este domingo por la televisión la toma de Damasco por medio de una ofensiva relámpago y la caída del régimen de Bashar al Asad, quien de acuerdo al presidente electo de Estados Unidos Donald Trump huyó del país tras perder el respaldo de Rusia.
En la transmisión de televisión de la agencia AFP se observaba a decenas de personas salieron a las calles de Damasco, para celebrar la caída del régimen controlado desde hace más de 50 años por la misma familia, y de personas pisoteando una estatua de Hafez al Asad, el padre de Bashar.
Los actos se desarrollaron en la plaza de los Omeyas, donde se escuchaban las detonaciones de rifles de asalto y otras armas como señal de alegría, los cuales se mezclaban con los gritos de «Allahu Akbar» («Dios es el más grande»).
En televisora estatal siria los rebeldes anunciaron la caída del «tirano» Bashar al Asad y la «liberación» de Damasco, al tiempo en que manifestaron haber liberado a todos los prisioneros «detenidos injustamente» por el régimen de Bashar, y pidieron salvaguardar la propiedad del Estado sirio «libre».
Rami Abdel Rahman director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) con sede en Inglaterra que cuenta con una amplia red de fuentes dentro de Siria, expresó a la France Press que el jefe de Estado Asad salió de Siria desde el Aeropuerto Internacional de Damasco antes de que los miembros de las fuerzas armadas y de seguridad abandonaran el lugar, aunque no se ha confirmado oficialmente el paradero del mandatario que gobernó Siria con mano de hierro durante 24 años.
Mientras que en la Unión Americana su próximo mandatario Donald Trump, aseguró que Bashar al Asad «huyó de su país» tras perder el respaldo de Rusia, “Asad se ha ido. Huyó de su país. Su protector, Rusia, Rusia, Rusia, liderada por Vladimir Putin, ya no estaba interesado en protegerle». Mientras el saliente presidente americano Joe Biden está siguiendo «con atención» los «extraordinarios acontecimientos» en curso en Siria.
En medios de comunicación sirios se publicó que el país es escenario de una guerra civil desde la violenta represión en 2011 por el régimen de Al Asad de las manifestaciones prodemocráticas en el marco de las denominadas «primaveras árabes».
Detallaron, después de décadas de estancamiento, el 27 de noviembre una alianza rebelde liderada por islamistas lanzó una ofensiva relámpago en el noroeste de la nación árabe, conquistaron rápidamente varias ciudades con el objetivo de llegar a Damasco y derrocar al presidente. También pidieron a los sirios desplazados en el extranjero por el conflicto que vuelvan a una Siria «libre».
Resaltaron el conflicto bélico en Siria ha cobrado la vida de medio millón de personas desde 2011, ha dividido al país en zonas de influencia con fuerzas beligerantes apoyadas por potencias extranjeras.
A través de su perfil de Facebook el primer ministro sirio, Mohamed Al Jalali subió un video donde indicó que estaba dispuesto a cooperar con cualquier nuevo «liderazgo» elegido por el pueblo.
Los rebeldes sirios recalcaron en sus mensajes que Damasco ha caído en sus manos, el presidente sirio Bashar al-Assad, ha huido en avión a un lugar desconocido. Se ha ordenado a todos los soldados leales a Assad que se rindan.
Subrayaron, “después de 50 años de opresión bajo el gobernante partido Baaz, y 13 años de crímenes, tiranía y desplazamiento [desde el comienzo del levantamiento en 2011] anunciamos hoy el fin de esta era oscura y el comienzo de una nueva era para Siria», afirmaron los rebeldes.
Al respecto, el líder del grupo islamista radical Hayat Tahrir al Sham (HTS),Abu Mohammad al Jolani, que encabeza la coalición rebelde apoyada por Turquía, pidió a sus combatientes que no se acerquen a las instituciones públicas y que permanecen bajo la autoridad del primer ministro hasta el «traspaso oficial» del poder.
Las tropas del Hezbolá libanés un apoyo clave de Al Asad, retiró sus fuerzas de las afueras de Damasco y de la región de Homs, en el oeste, la coalición de grupos rebeldes liderada por HTS, un grupo que estuvo relacionado con Al Qaeda, logró un avance espectacular en tan solo diez días, tomando las ciudades de Alepo, Hama y Homs hasta su entrada en Damasco el domingo.
Los ataques rebeldes iniciaron en la provincia de Idlib, bastión de HTS en el noroeste de Siria, a pesar de los ataques aéreos de Rusia, aliada del régimen, y de las operaciones terrestres. El ejército sirio perdió el control de la ciudad de Daraa, cuna del levantamiento de 2011 y situada al sur de la capital, cerca de la frontera con Jordania.