Protegerá Xóchitl Gálvez a huérfanos por la violencia
Frente a colectivos que luchan por los derechos de las infancias, familiares de personas desaparecidas y madres buscadoras, la candidata a la Presidencia de la República por el PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez Ruiz, se comprometió a apoyar a niñas, niños y adolescentes que quedaron huérfanos porque alguno de sus padres fue asesinado o está desaparecido.
La mañana de este domingo, la ingeniera asistió a la Plaza del Caballito en Morelia, Michoacán, donde asociaciones civiles colocaron decenas de zapatos en representación de los 13 mil 431 niños asesinados en hechos violentos durante este sexenio.
Desde ese lugar, la aspirante presidencial lamentó que no hay vacunas para menores y que el Gobierno Federal quitó las estancias infantiles y las escuelas de tiempo completo.
“Yo hago un compromiso aquí frente a las madres buscadoras: de entrada nos vamos a hacer cargo de los niños, de los hijos que desaparecieron o de las hijas que desaparecieron. Estamos hablando de miles de niños huérfanos, 250 mil niños huérfanos por el Covid, ¿quién ha hablado de ellos?”, dijo en el acto.
Agregó que en su proyecto de país pondrá énfasis en los hijos de las mujeres asesinadas, quienes quedaron desprotegidos después del feminicidio y no hay una política pública clara que los atienda.
En su mensaje, reprochó el abandono en el que se encuentran los refugios para mujeres. “No les conmueve que no hayan recibido un solo peso los refugios para familias que sufren violencia y digo familias porque en estos refugios no solo van mujeres violentadas, van mujeres con sus hijos violentados y muchas veces esas mujeres son asesinadas por no haber tenido un refugio a tiempo”, expresó.
Enfatizó que uno de los mayores peligros que vive México es que se normalice la violencia y nos acostumbremos a que asesinen a un niño o a una niña.
Gálvez Ruiz recalcó que lo más importante es que no nos resulte indiferente el dolor y que este dolor sea semilla de justicia, que nos convoque a trabajar por un México sin miedo.
Solemos hablar mucho de los jóvenes asesinados, porque se han visibilizado estos homicidios en Lagos de Moreno, en Salvatierra, en Celaya.
Pero cuando ves la cifra de más de 13 mil niños asesinados, pues sí es una cifra que en conjunto y con todos estos pares de zapatos pues te imaginas el dolor de miles de familias en México que hoy se encuentran quebradas, devastadas.
Prácticamente en todos los estados he podido abrazar a madres buscadoras. Hoy me tocó abrazar a una madre que perdió a su esposo y dos años después a su hijo, dos desaparecidos en una misma familia. Karla, muchas gracias por la invitación.
Cuando recibí la invitación no dudé en estar aquí, ojalá todos los que aspiramos a un cargo público pudiéramos visitar esta plaza con estos miles de pares simbólicos representando a los niños que hoy no están con nosotros.
Agradezco a las madres buscadoras de Michoacán, a los colectivos ciudadanos de familiares desaparecidos y desaparecidas y a todas las asociaciones civiles que participan.
Cuando digo que lo que más amo en la vida es a mis hijos es cierto yo creo que para una madre no hay amor más grande que el que puedes sentir por tus hijos y si te pones
en los zapatos de una mamá cuyo hijo o hija ha desaparecido o ha sido asesinado es una cosa de empatía porque realmente nos puede pasar a cualquiera hoy prácticamente nadie está seguro.
Y en ese sentido yo lo que quiero decir esta mañana que uno de los mayores peligros que vive México es que se normalice la violencia, que nos acostumbremos a la violencia, que los medios de comunicación dejen de sacar esas noticias que, por dolorosas que sean no nos podemos acostumbrar a que asesinen a un niño o a una niña.
Seguramente esos 13 mil, más de 13 mil niños, en muchos casos no han sido noticias, 13 mil 471 niños no han sido noticias, pero así han sido un tema muy doloroso para las familias.
Hoy venimos a sentir ese dolor, a compartir ese dolor para que el sufrimiento por tantas vidas rotas jamás nos resulte indiferente, que este dolor sea semilla de justicia, que este dolor sea un antídoto contra el olvido, que este dolor nos convoque a trabajar por un México donde ningún niño o niña pierda la vida en un acto de violencia.
Eso es la lección que hoy recibimos y que todos los políticos que aspiramos a un cargo público deberíamos de entender que la única razón por la que tú puedes aspirar a un cargo público es porque sientes el amor por el prójimo.
Porque si eres un político que deja de sentir ese amor, te vuelves en un político insensible, en un político que no te conmueve que una madre busque a sus hijos, que no te conmueve que una madre no tenga un medicamento para el cáncer.
Tienes razón Karla, cuando reclamas el por qué no es un tema de enojo nacional que no hay vacunas para niños, no hay vacunas para niños, es el mínimo derecho que tiene un niño a la salud, que hayan cerrado las estancias infantiles sin que los mexicanos prácticamente se hayan levantado en protestas masivas, lo hicieron las educadoras, lo hicieron algunas familias.
¿Y qué dijeron? Que había actos de corrupción. No es cierto, es un odio a que como estas estancias habían sido hechas o impulsadas por un gobierno de Felipe Calderón, pues entonces hay que destruir.
Hay que destruir todo lo que suene a pasado y dejamos a miles y miles de niños sin la posibilidad.
Que quede claro, la primera infancia es vital, ahí es a donde se define el destino de un niño. Cuando hablamos del derecho humano a la vida, pues es el tema más más importante, ojalá el Presidente de la República pudiera venir y reflexionar sobre el tema de seguridad.
Yo hago un compromiso aquí frente a las madres buscadoras, de entrada nos vamos a hacer cargo de los niños, de los hijos que desaparecieron o de las hijas que desaparecieron, estamos hablando de miles de niños huérfanos, 250 mil niños huérfanos por el COVID, ¿quién ha hablado de ellos? Nadie.