Seguridad

Reingresa al Reclusorio Norte el exprocurador Jesús Murillo Karam

José Ángel Somera

En medio de un dispositivo de seguridad fue ingresado del Instituto Nacional de Cardiología (INC) en Tlalpan al Reclusorio Norte, el extitular de la extinta Procuraduría General de la República (PGR) Jesús Murillo Karam.

El exgobernador de Hidalgo se encuentra enfrentando proceso en el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, como presunto responsable de los delitos de tortura, desaparición forzada y el delito contra la administración de la justicia, por el caso de los 43 estudiantes de la escuela normal rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, en septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.

El sistema penitenciario de la metrópoli llegó a la conclusión de internarlo en el hospital de especialidad cardiaca, debido a que el exdiputado federal comenzó a sentirse mal.

Mientras tanto, el representante legal del exlíder nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Javier López García, advirtió que el estado de salud de su cliente continúa delicado, y que resulta preocupante que se presente un evento vascular cerebral y no pueda atenderse oportunamente en el centro de reclusión de Cuautepec Barrio Bajo en la alcaldía de Gustavo A. Madero, con esto, se aumente el riesgo de un daño permanente o fatal.

Insistió, en los últimos 15 días, fue necesario que al exfuncionario del sexenio de Enrique Peña Nieto, lo trasladaran hasta en tres ocasiones a diversos centros hospitalarios, lo anterior para el manejo y control de sus condiciones de salud.

Murillo Karam considerado parte del grupo Hidalgo en el PRI, padece enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), hipertensión arterial sistémica e insuficiencia vascular cerebral.

El mes pasado, la defensa del exabogado de la nación recalcó que su salud era delicada, porque había presentado un cuadro de presión arterial alta (hipertensión) de 190/112 mm Hg o superior, a finales de diciembre de 2022 Murillo Karam, fue trasladado de la Torre Médica de Tepepan al Reclusorio Norte, tras su ingreso a este centro penitenciario ha sido trasladado en más de ocho ocasiones de éste a diversos hospitales públicos para su atención médica.

Los traslados de emergencia fueron a cuatro instituciones del sistema sanitario público: Hospital General de Urgencias de Xoco, el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, donde se le práctico de emergencia una cirugía Edarterecotomia Carotidea de Alto Riesgo, Hospital Belisario Domínguez y la Torre Médica de Tepepan.

En el mes de agosto de 2022, el juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte Marco Antonio Fuerte Tapia, vinculó a proceso a Murillo Karam por su probable responsabilidad en delitos de tortura, desaparición forzada de personas y contra la administración de la justicia, derivados del caso Ayotzinapa.

La dependencia a cargo de Alejandro Gertz Manero durante sus investigaciones en estos hechos, acusó a Murillo Karam, de hacer uso de los recursos del Estado y de “fraguar premeditadamente” y de manera “dolosa” la llamada “verdad histórica” por la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa, teniendo como principal hipótesis una pugna entre grupos de narcomenudistas que operan en esa entidad.

En aquella ocasión en la audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte, el Ministerio Público Federal formuló la imputación en contra del extitular de la PGR, en la que sostenía que Murillo Karam organizó un “cónclave” con autoridades de alto nivel para fabricar dicha versión del caso.

Asimismo, responsabilizó a Murillo Karam de ordenar al entonces director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) Tomás Zerón de Lucio -prófugo de la justicia y oculto en Israel-, de alterar la escena de los hechos en el Río San Juan en Cocula, así de como de torturar a cuatro integrantes de la empresa delictiva “Guerreros Unidos”, para que confesaran su presunta participación en los hechos.

Los señalamientos de la FGR se basaron en los informes de organizaciones de derechos humanos y del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, aunado a que “Murillo Karam como titular de la PGR, ordenó actos de tortura para obtener confesiones e impidió que los familiares de los 43 normalistas tuvieran acceso a la información y presentó videos de supuestas confesiones para seguir un libreto de actores y pruebas y narrativas que se conoció como la verdad histórica”.

La FGR también solicitó a un juez federal 83 órdenes de aprehensión por el caso Ayotzinapa contra mandos militares, autoridades estatales y municipales de Guerrero, así como integrantes de “Guerreros Unidos”, entre los imputados se encontraban 20 mandos militares y personal de tropa del 27 y 41 batallones de Iguala, cinco autoridades administrativas y judiciales de Guerrero, 26 policías de Huitzuco, seis de Iguala, uno de Cocula, 11 estatales de Guerrero y 14 miembros de “Guerreros Unidos”.