Más del 30% del país está controlado por el crimen organizado
El senador Damián Zepeda Vidales fijó el posicionamiento del GPPAN en relación con el dictamen que reforma diversos ordenamientos legales en materia de Guardia Nacional y Seguridad Pública, señalando la importancia de no doblegarse ante los caprichos del presidente, pues su administración es de las más violentas que existen en la historia de México.
Hoy lamentablemente México está hundido en la violencia, hay que decirlo con todas sus letras, al día de hoy bajo el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y de Morena hay más inseguridad que nunca en este país, esa es la realidad, dijo el senador.
Hoy, en este gobierno, no en el gobierno neoliberal del pasado y que no sé cuántas cosas, hay más de 120 mil personas asesinadas en este país, la gran mayoría a manos del crimen organizado; hoy en este gobierno hay más del 30 por ciento del territorio nacional controlado completamente por el crimen organizado, ahí manda el crimen, no manda ni el alcalde ni la policía, o te cuadras o te doblo, esa es la realidad de al menos el 30 por ciento del territorio nacional el día de hoy.
Hoy el crimen secuestra, extorsiona, viola, asesina, cuelga de puentes y el gobierno se queda nada más mirando.
Y es cierto, es cierto lo que dicen, la violencia no empezó con el gobierno de López Obrador, pero se ha incrementado.
Desde hace 16 años, no hay que tener miedo de decir las cosas, se tomó una decisión en este país, y fue en un gobierno emanado que yo soy parte, que fue “vamos a combatir al crimen organizado”, y esa estrategia que creo tenía la buena intención de darle paz a los mexicanos resultó un fracaso, esa es la realidad, los datos lo dicen así, creció la violencia, no hay manera de decir otra cosa, continúo en el siguiente gobierno, pero lo increíble es que hoy en el gobierno que prometió hacer las cosas distintas, no sólo se sigue la misma estrategia fracasada, sino que se ha incrementado.
¿Qué es esta estrategia?: Militarizar, militarizar y militarizar más el país.
No me cabe en la cabeza, se los digo de verdad, no me cabe en la cabeza cómo viendo toda la evidencia de los últimos 16 años, de que ha sido un fracaso la militarización del país, hoy se tengan casi el doble de militares encargados de la seguridad pública, con, por supuesto, muchos más homicidios.
En el pico de la guerra contra el narcotráfico que se llena la boca el Presidente de mencionar una y otra vez, había 50 y tantos mil militares encargados de la seguridad pública en el país.
Hoy, bajo el gobierno supuestamente no militarista de Andrés Manuel López Obrador, hay más de 100 mil elementos de las Fuerzas Armadas, y pues estaría bien si funcionara, pero en lo que lleva, cuatro años, cuatro años nada más de gobierno, ya tiene más muertos López Obrador en su gobierno, que todo el sexenio junto de Felipe Calderón.
Y entonces pues, por qué creen que son tan sabios que van a hacer más inteligentes que Einstein, que decía con toda claridad, es imposible que tengas un resultado distinto si siempre haces las mismas cosas, cómo creen que hacer más de lo mismo les va a traer un resultado distinto, como por qué.
Entonces, nosotros decimos: No. Tenemos muchos motivos para rechazar esta reforma, muchos de ellos de legalidad y ahorita voy a entrar a ellos, pero no le voy a sacar las vueltas al tema, de fondo decimos no, no estamos de acuerdo en la militarización de la seguridad pública de este país porque ha resultado un fracaso, no nada más en México, en el mundo, ¿por qué no funciona en el mundo?, porque los ejemplos que ponen, no, es que en tal lugar y en tal lugar, son mentiras, no están encargadas las Fuerzas Armadas de seguridad pública ni en los ejemplos que se recetan desde “La Mañanera”, no es cierto.
¿Por qué no funciona?: porque las Fuerzas Armadas en el mundo están formadas para algo distinto, para combatir al enemigo, por eso cuando entran en estas labores normalmente generan una ola de más violencia, normalmente se genera un aumento de las violaciones de derechos humanos, normalmente, no normalmente, siempre son mucho más opacas porque les aplica la Ley de Seguridad Nacional y tienen protecciones de transparencia y todo lo ocultan.
Por eso no funciona que las Fuerzas Armadas se encarguen permanentemente de la seguridad pública.
Ahora nos quieren llevar a un falso debate, ah, entonces que no nos ayuden, nadie está diciendo eso, nadie está diciendo que no pueden ayudar, hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos dice: claro que sí, siempre y cuando sea, y lo dice nuestra Constitución, de manera extraordinaria, complementaria a las fuerzas civiles, subordinadas a las fuerzas civiles, fiscalizados por entes externos, temporal, eso, claro, bienvenida esa ayuda, pero eso no es lo que quiere el presidente López Obrador.
El presidente López Obrador ya se quitó la máscara, dijo fuera máscaras, quiero militarizar el país, yo lo decía ayer y lo repito hoy, yo no sé por qué sus legisladores siguen insistiendo que no quieren militarizar México, cuando su jefe máximo, tlatoani, caudillo, líder máximo, casi Dios, ya dijo: sí, sí quiero militarizar a México.
Bueno, cuando menos está siendo honesto, pues ya, ya dejen ese discurso de que no es cierto, y qué triste porque millones de mexicanos le creyeron y no se vale engañar así a la gente; él les dijo de frente: ¿sabes qué?, ha fallado la estrategia de seguridad y yo te prometo que si votas por mí –eso lo dijo él, no yo–, yo voy a cambiar la estrategia y voy a mandar a los militares a los cuarteles y voy a pacificar al país, y millones de mexicanos votaron por él por eso, cansados de la violencia en el país. Y hoy con la mano en la cintura: ¿qué creen?, cambié de opinión.
No, señor presidente, no es tan fácil, es usted presidente constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, y la gente le dio un mandato, garantizar la paz, responda, dé resultados, eso es lo que le exigimos.
Y la verdad de las cosas es que ni siquiera cambió de opinión, hombre, pues si la iniciativa de la Guardia Nacional Militar, ¿cuándo la mandó?: a unos meses que acababa de tomar protesta, engañó a los mexicanos, y no se vale, y aquí estamos en el Senado de la República hombres y mujeres valientes para decirle: no, señor presidente, no le vamos a permitir que militarice este país.
Por eso hoy nosotros decimos: vamos a hacer algo distinto, vamos a darle paz a los mexicanos, cambiemos la estrategia de seguridad, ¿hacia qué?: hacia una estrategia que diferencie, que busque desarticular el crimen organizado, no dejarlos pasar mientras están secuestrando, violando y extorsionando, que los busque desarticular con inteligencia financiera para quitarles el poder económico, el dinero, una Unidad de Inteligencia Financiera fuerte, robusta, que persiga delincuentes, no políticos, enemigos políticos, eso es lo que necesitamos en el país, y a nivel local una estrategia de fortalecimiento de policías estatales y municipales porque compañeros, perdón, pero vean el Inegi, en México hay 30 millones de delitos al año, 30 millones, 27 cuando bien nos va. Y hay 34 mil homicidios dolosos, no los estoy minimizando, pero 30 millones contra 34 mil, por favor.
Cuando le preguntan a la gente cuál es tu primer contacto con la inseguridad, qué te contesta, te contesta el 60 por ciento de la gente “salgo de mi casa y en el parque están tomando, se están drogando y me da miedo, voy caminando y no hay alumbrado y me asaltan, me roban en el transporte, me roban en mi casa, me roban en el carro”. Eso contestan.
¿De veras creen que tiene sentido que militares con armas largas, con sus carrotes, sus hummers, anden patrullando en las colonias de este país? ¿Eso creen que es la respuesta a la inseguridad pública? No. La respuesta es fortalecer policía estatal y municipal y crear un cuerpo civil, nacional, de élite, que se haga cargo de la responsabilidad del gobierno federal, que es combatir al crimen organizado.
Porque aquí se la llevan echando la bolita, pero el responsable constitucional de combatir al crimen es el gobierno federal. Lo es hoy con Morena, lo fue ayer con el PRI y los fue antier con el Partido Acción Nacional y ahí hay que exigir resultados.
Hoy el gobierno tiene que hacerse cargo de que sus acciones y sus omisiones tienen consecuencias. Y yo me pregunto, ¿para qué querías ser gobierno si te ibas a arrodillar frente al crimen organizado?
Porque lo que vimos en Culiacán, de tomar a un líder de una banda criminal y doblarse ante el poder del crimen organizado le puso un terrible ejemplo al crimen en este país y hoy lo están replicando. Por eso vimos lo de Jalisco, por eso vimos lo de Guanajuato, por eso vimos lo de Baja California, por eso vimos lo de Ciudad Juárez. Claro.
El crimen dice “por qué te atreves a combatirme, gobierno, si debe de estar doblegado”. No. Los mexicanos exigimos paz. Y al gobierno le decimos: es momento de dar resultados, no rehuir a su responsabilidad.